Crema rusa 1987

    Una receta fresca y ligera típica de los años 80, ideal para el verano. Combina pepinos, puerros, yogur natural y mostaza en una crema fría deliciosa. Perfecta como entrante o para una cena ligera. Refrescante, rápida y con ingredientes sencillos de encontrar.

Fuente: Revista Clan TV nº 24, 1987

    La crema rusa fue una de esas preparaciones que ganaron popularidad en la década de los 80, cuando las recetas ligeras y frescas comenzaron a ocupar un lugar destacado en los menús familiares. Procedente de tradiciones culinarias del este de Europa, esta versión española publicada en 1987 propone una adaptación sencilla con ingredientes asequibles: pepinos, puerros y yogur. El toque de mostaza fuerte, tan característico de la época, aporta personalidad al plato, mientras que el toque de limón y azúcar equilibra los sabores.

    Es una receta que refleja bien el espíritu práctico de la cocina ochentera: fácil de preparar, rápida y perfecta para los meses de calor. Se servía como entrante frío en reuniones veraniegas, acompañada a menudo de pan tostado o picatostes. Gracias a su bajo contenido calórico y su frescura, sigue siendo una excelente opción para quienes buscan platos sencillos pero sabrosos. Ideal tanto para un almuerzo ligero como para una cena desenfadada.

Tiempo estimado: 45 minutos
Dificultad: Fácil

🍃 Ingredientes:

	Ingrediente	Cantidad
●	Pepinos	3 unidades
●	Puerros	3 unidades
●	Huevos duros	2 unidades
●	Mostaza fuerte	2 cucharadas
●	Yogur natural	1 unidad
●	Azúcar	1 cucharadita
●	Limón	Al gusto
●	Sal	Al gusto

🧾 Instrucciones paso a paso:

1. 1 Pela los pepinos y desecha la parte verde más amarga, dejando solo la parte blanca. Córtalos en láminas muy finas para facilitar su macerado.
2. 2 Coloca las láminas en un colador, espolvoréalas con sal y déjalas escurrir durante 30 minutos. Esto suaviza el sabor y elimina el exceso de agua.
3. 3 Limpia bien los puerros, retirando las hojas exteriores duras y la parte verde. Córtalos en rodajas finas, lávalos y escúrrelos bien.
4. 4 Cuece los huevos durante 10 minutos en agua hirviendo. Una vez fríos, pélalos y pícalos en trozos pequeños para integrarlos fácilmente.
5. 5 En un bol, mezcla el yogur natural con la mostaza fuerte, el azúcar, un chorrito de zumo de limón y una pizca de sal. Bate con energía hasta obtener una crema uniforme.
6. 6 Incorpora los pepinos escurridos, los puerros en rodajas y los huevos picados a la mezcla de yogur. Remueve suavemente hasta que todo quede bien integrado.
7. 7 Tapa el bol y refrigera la crema al menos 2 horas antes de servir. La clave está en servirla bien fría para potenciar su efecto refrescante.